Las Sociedades de Capital Riesgo (SCR) o Venture Capital son una alternativa más que tienen los emprendedores en el momento de buscar financiación para su proyecto empresarial.
Son entidades, como su nombre indica, que aportan a la empresa principalmente capital y cuya participación en la misma es de carácter temporal.
Los fondos de private equity o de capital privado son aquellos que invierten en empresas no cotizadas en Bolsa y que necesitan un empujón financiero para su crecimiento. Se trata de una alternativa de financiación que el empresario debe valorar.
Hace dos años y medio que nacía la primera plataforma de crowdfunding 100% mexicana con un pensamiento muy claro: el dinero debe ser el último limitante para explotar todo nuestro talento. Estamos hablando de Fondeadora, una asociación civil cuya misión es potenciar las ideas innovadoras cuya puesta en marcha está restringida por falta de recursos.
Desde Reino Unido ha aterrizado en España hace algunos meses una nueva plataforma de equity crowdfunding que permite invertir online en startups y pymes a partir de 10 euros y en sólo tres clicks de ratón. Estamos hablando de Crowdcube, que, desde su lanzamiento en 2011, cuenta con más de 80.000 inversores registrados y más de 130 empresas que han obtenido financiación por valor de alrededor de 40 millones de euros.
Siendo originaria de Suecia y tras establecerse en otros seis países más, la plataforma de crowdfunding FundedByMe llegó a España a finales de 2013 con el propósito no solo de abrir nuevas vías a la financiación de los emprendedores del país, sino de facilitar la obtención de capital extranjero gracias a la conexión con estos siete países.
Crowdcube es una plataforma líder en Europa del ámbito del equity crowdfunding que acaba de aterrizar en España orientada a todo tipo de pymes y startups para facilitar que, mediante pequeñas inversiones, lleven a cabo sus proyectos. Esta clase de plataformas se presentan como una gran alternativa a las fuentes de financiación tradicionales que hacen posible que los emprendedores puedan materializar sus ideas.
El crowdfunding o financiación en masa ha revolucionado el modo en que los emprendedores consiguen el ansiado capital para poner en marcha sus proyectos. Si hace unos años la única vía era que un inversor aportase la totalidad del dinero, el crowdfunding apuesta por que muchos inversores realicen pequeñas contribuciones económicas hasta alcanzar la cantidad deseada.
Las plataformas de financiamiento colectivo se erigen como una opción a considerar por los emprendedores en Latinoamérica. Son, en realidad, páginas webs donde el creador puede publicar su proyecto y el montante económico que espera conseguir. Así, los usuarios serán quienes decidan apostar por el proyecto o no. Hay un plazo; si finalizado este se ha conseguido la cantidad demandada, el proyecto podrá salir adelante, si no, cada usuario recibirá lo que en su día aportó.
El crowdsourcing podría definirse como una herramienta que ofrece el mundo digital para externalizar tareas a través de una comunidad de usuarios que aportan sus conocimientos bajo el mismo fin.
Si desmenuzamos el término es posible reducir su significado a dos palabras: inteligencia colectiva.Este vocablo no es del todo nuevo, aunque quizás lo sea más que la práctica en sí misma, que nació casi al mismo tiempo que Internet.
El acceso a la financiación es un asunto que sigue trayendo quebraderos de cabeza a las PYMES. La parte buena es que las pequeñas y medianas empresas cuentan con un amplio abanico de posibilidades. Una curiosa opción son los family offices, es decir, oficinas que gestionan el elevado patrimonio de grandes empresas familiares y que buscan inversiones financieras en otros negocios que les aporten rentabilidad.